Mi experiencia con
BBVA AutoRenting.
Voy a relatar aquí mi experiencia en la compra de un coche de segunda mano a BBVA Autorenting.
Cuando busqué un compra-venta quería no tener problemas y por eso intenté encontrar uno que me inspirase confianza. Cuando descubrí BBVA AutoRenting busqué opiniones y/o comentarios sobre ellos, sin éxito por lo que al menos ahora habrá en Internet una opinión, que es la mía y que para nada tiene por qué coincidir con otros clientes.
A través de la página coches.net encuentro un anuncio de un
todocamino en el que estoy interesado. Llamo para pedir información sobre el
coche y el comercial de Madrid que me atiende (y que será en todo momento
siempre la misma persona la que me atenderá), me comenta que estoy hablando con
BBVA. Que el coche por el que pregunto proviene de un renting que alguien hizo
con BBVA y que las ventajas son que obligatoriamente tienen que pasar las
revisiones en la casa, que tienen el libro de revisiones sellado, que los
kilómetros son certificados, que no ha tenido ningún accidente, que tienen y se
me entregará el historial del coche, que está perfecto de interior y que del
exterior reparan cualquier daño que tuviese, por lo que también está perfecto.
Al tener
Además me informa que los coches que venden ellos son seleccionados. Los que no pasan la selección por no cumplir alguno de los puntos anteriores o tiene muchos kilómetros, los venden a compra-ventas.
Vamos, que todo pintaba muy bien.
El coche está en Madrid y yo en Barcelona por lo que hablo con el comercial en repetidas ocasiones dejando claro que estoy realmente interesado en la compra pero que no querría desplazarme hasta Madrid, con el niño de 2 años, la mujer y las maletas, para que luego algo no sea como me cuenta.
En una de estas llamadas me confirma que en el coche no se ha fumado y que me ha mirado los neumáticos y que están “nuevos, nuevos, nuevos”.
Viendo todo tan correcto, voy a mi entidad bancaria a por un talón de 21.100 Euros a nombre de BBVA Finanzia AutoRenting, S.A. compramos los billetes con AVE detino a Madrid y nos desplazamos nuestro hijo, mi mujer y yo.
Llego allí tras pasar peripecias desde la estación de metro más cercana, hasta llegar al centro comercial Makro de Alcobendas andando con el cochecito y las maletas y me dan las llaves del coche para que lo revise.
Lo revisamos como buenamente pudimos pues no somos expertos en la materia. De ahí que recurriese a un servicio de venta con precio unos 2.000 euros más caro que la mejor tasación del vehículo y que otra oferta similar en un concesionario. Ni tan sólo fuí a probarlo porque la confianza con la que iba por las conversaciones telefónicas era muy grande.
Pero una vez allí, tras más de 500km, la actitud, el trato y el estado del vehículo, según la descripción, cambió mucho.
Le comento a la persona que en todo momento me atendió que falta por sellar una revisión (me había comentado que todas estaban selladas), que tenia algunas ralladitas en el exterior (me había comentado que cualquier daño de chapa estaba reparado),
que en el interior hay rayadas también (me había comentado que estaba perfecto),
arena de playa en maletero y asientos (me había comentado que trabajaban con la mejor empresa de limpieza integral y lo dejaban perfecto).
La respuesta a estas diferencias respecto de la descripción realizada en las distintas llamadas telefónicas, es que tengo que tener claro que es un coche de segunda mano, que no es nuevo…
Le argumenté que había llamado en diferentes ocasiones para evitar precisamente eso, que la descripción realizada fuese distinta de la realidad y que evidentemente sabía que era de segunda mano, de ahí las múltiples llamadas consultando por el estado de distintos detalles del coche.
Le invité a, por favor, salir de su despacho a mirar el coche conmigo a lo que no accedió pues lo había mirado hacía unos instantes porque sabía que me desplazaba yo desde Barcelona.
Que le sabe mal haberme hecho venir hasta allí para nada… “Xavi, no te lo quedes”, me repitió en repetidas ocasiones.
Le pregunté a mi mujer, delante del vendedor, que viendo tales errores, que qué haciamos? Mi mujer me decía que lo que yo crea…
A pesar de la incorrecta descripción, ya me había hecho a la idea del coche, tenía apalabrado el mío y llevavamos las maletas para hacer las vacaciones (ha sido en agosto) visitando Madrid, ya que nos habíamos desplazado, y con ese coche ir hasta Almería donde están mis suegros.
Me lo llevo y al usarlo descubro adicionalmente a lo que descubrí en las instalaciones del Makro de Alcobendas que:
Un conocido mío que entiende más que nosotros le hechó un vistazo y detectó además:
(Foto del estado de los neumaticos montados)
(Foto del neumático de recambio del maletero, identico a los montados en el coche pero en buen estado)
Otro error es que a pesar de que en mi DNI pone una dirección anterior a la actual, les indiqué la dirección correcta. A pesar de ello, la factura, el contrato y el cambio de nombre ha llegado o se está tramitando con la dirección incorrecta.
Al pagar 21.100 euros por un coche entendí que su estado serría acorde a dicho precio. Este precio es superior a 2.000 euros respecto de la mejor tasación y de otros coches idénticos y unos meses más nuevos, para evitarme problemas de ningún tipo.
Algunos de los problemas descritos creo que me los podrán solventar en el concesionario bajo garantía, pero me ocasionará molestias importantes por tener que quedarme sin coche y tener que ir a llevarlo y recogerlo. Otros como el tema del pulimento blanco incrustado y de la limpieza integral los podré solventar yo con horas de trabajo.
Otros problemas descritos no me los cubrirán por considerarse desgaste del vehículo.
Es por todo ello que les solicitaré algún tipo de solución a esta falta de conformidad en la compra del vehículo y publicaré la solución propuesta tanto en esta web como en coches.net y forocoches.net que es dónde se anunció el coche.
Saludos!